Aprendizaje Cooperativo

Actividad 5

La actividad de la sexta sesión de clase tiene que ver con el Aprendizaje Cooperativo y consiste en la implantación de una estructura de cooperación en el aula. Para llevarla a cabo se nos ha facilitado un documento con toda la información necesaria para agrupar a los 22 alumnos de una clase de manera que realicen trabajo cooperativo. También debemos elegir la disposición de los grupos y del profesor en el aula que consideremos que es la mejor para llevar a cabo la tarea.

Antes de comenzar a detallar los criterios para la formación de los grupos y la elección de su disposición se debe tener en cuenta que estamos ante una clase de Biología y Geología de 4º de E.S.O., con edades comprendidas entre los 15 y 16 años.

Tras hacer varias consideraciones en cuanto al tamaño de los grupos, se ha decidido que el número total de grupos sea de cinco ―un número manejable que facilita el control y la interacción por parte del profesor― divididos en tres grupos de cuatro alumnos y dos grupos de cinco alumnos. Los grupos tendrán un carácter heterogéneo para intentar que en ellos estén representadas todo tipo de personalidades, actitudes y aptitudes. Otros aspecto a tener en cuenta es que se ha decidido que los grupos mantengan su composición a lo largo de todo el trimestre (salvo problemas de fuerza mayor que puedan surgir en alguno de ellos, en cuyo caso habría que replantear la composición)

Criterios para la confección de los grupos:

Evaluaciones anteriores: Al filtar a los alumnos por este criterio tenemos que hay cinco alumnos que presentan muy buenas calificaciones en anteriores evaluaciones y que van a ser los coordinadores de cada uno de los grupos.
Habilidades cooperativas: Ya que la mayoría de los elegidos coordinadores presentan niveles altos de habilidades cooperativas, se les va a juntar con compañeros que presentan niveles más bajos para tratar de conseguir cierta homogeneidad positiva a lo largo del trimestre.
Elecciones: Se intenta que no coincidan en un grupo alumnos que se elijan entre ellos para evitar grupos dentro de los grupos y para favorecer que los alumnos se relacionen con toda la clase.

Elección de la disposición de los grupos y del profesor en el aula:

La mesa del profesor adopta una posición más centrada en el aula que de costumbre. Durante el periodo de trabajo cooperativo, el profesor paseará por la clase para apoyar a los grupos en aquello que necesite, resolver las dudas que le planteen y controlar la dinámica de los grupos.
Próximos a la mesa del profesor se dispondrán los dos grupos de cinco alumnos para poder tener un mayor control por parte de éste. Aunque no es un criterio que se haya seleccionado para la creación de los grupos, si se ha tenido en cuenta el nivel de disrupción de los alumnos para colocarlo próximos a la mesa del profesor.

En base a lo anteriormente expuesto, la composición del aula para el trabajo cooperativo, quedará de la siguiente manera:

Algunos otros aspectos a tener en cuenta son:

Todos y cada uno de los alumnos deben participar en la actividad y aportar su parte del trabajo en el tiempo y forma que determinen al inicio de la actividad.
Los niveles de ruido en el aula deben ser aceptables para crear una dinámica de trabajo. Para ello, el profesor dispone de un cartel en clase en el que indica cuál es el nivel deseado. Dentro de cada grupo, habrá un alumno encargado de controlar que no se superen los niveles.
Dentro de cada grupo se deben respetar los turnos de palabra por lo que se tratará de no interrumpir las intervenciones de los compañeros hasta que éstas hayan concluido. Esta medida contribuirá al buen funcionamiento de los grupos y al control del nivel de ruido.
Los alumnos sólo interactuarán con sus compañeros de grupo y no lo harán con compañeros de otros grupos con vistas a mantener un ambiente de trabajo apropiado. En los momentos que el profesor establezca, los alumnos designados de cada grupo, podrán reunirse con los de los demás para poner cosas en común.